Tener una estancia vacía esperando ser decorada totalmente es algo que nos apasiona, pero empieza a ser un poco menos agradable cuando tenemos que escoger qué estilo es el que más nos gusta para esa habitación debido a la cantidad de opciones que tenemos y nuestra indecisión.
En cuanto a estilos, existen multitud de ellos, todos muy diferentes, lo que nos hace todavía más complicado saber cuál es el ideal para nuestra estancia.
Hoy os lo vamos a poner un poco más fácil y os vamos a hablar del estilo colonial, un tipo de decoración que, aunque pasen los años, no pasa de moda y sigue enamorando a todo aquel que lo disfruta.
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¿A qué llamamos estilo colonial?
Para poder pasar a conocer lo que caracteriza al estilo colonial y saber por qué nos gusta tanto, lo primero que debemos hacer es conocer de donde proviene este tipo de decoración.
Pues bien, el estilo colonial tiene un origen histórico, ya que es una mezcla de estilo y cultura de los europeos con la de los indígenas cuando aquellos colonizaron Latinoamérica. En concreto, se combina el gusto en la construcción y mobiliario de los europeos con los materiales autóctonos de Latinoamérica, quedando por tanto piezas exóticas y tropicales.
El estilo colonial se puede utilizar siempre, independientemente tengamos estancias más o menos grandes, ya que se puede amoldar a cualquier dimensión. Asimismo, en todas ellas creará un ambiente muy cálido y agradable para todo aquel que disfruta de él.
Características del estilo colonial
Conociendo cuál es su origen seguro que todavía os atrae saber más sobre este estilo decorativo tan confortable. Pues bien, a continuación, os desciframos qué es lo que le caracteriza concretamente y qué es lo que le diferencia de los demás estilos decorativos.
Colores y materiales
Como en toda decoración el color es fundamental, no solo para crear sensaciones, sino también para determinar un tipo de estilo u otro. Ahora bien, en el estilo colonial tanto en los colores como en los materiales se busca la naturalidad, por lo que en este caso priman los colores neutros, tales como el blanco, gris, beige, marrones claros u ocres. Asimismo, si estos colores te parecen muy sosos, puedes combinarlos con tonos más vivos como el rojo, amarillo o el verde.
En cuanto a materiales, los que se utilizan predominantemente en este tipo de decoración son todos aquellos que den sensación de naturaleza, como pueden ser la madera, piedra, acero, membre o forja. Sin embargo, además de este tipo de materiales, el bambú es el que caracteriza totalmente al estilo colonial, por lo que no estaremos ante una decoración colonial si la presencia de bambú.
Si lo deseas también pueden lanzarte a colocar maderas exóticas como el mindi, wengué o iroko.
Grandes piezas de mobiliario
Otro de los elementos claves en una decoración, además del color y el material, es el mobiliario, ya que adquiere toda la atención cuando se entra en una sala y es lo que determina el estilo decorativo.
En el estilo colonial es muy importante saber que los muebles deben de recordar esa mezcla de culturas y a la colonización, por ello se suelen utilizan muebles de grandes dimensiones de madera, rústicos o vintage.
En el mercado existen hoy en día muebles de este estilo, muy ligeros y muy variados, tanto de forma, color o dimensión.
Algo que no podemos pasar por alto es que en el estilo colonial es imprescindible que junto al mobiliario incorporemos elementos naturales y plantas. Si éstas son tropicales mucho mejor para poder completar así la decoración.
Textil natural
Una decoración no solo se basa en el color de las paredes o en los muebles sino también en el textil que coloquemos, ya que todas las casas deben tener alfombras, cortinas, cojines etc.
Si nos centramos en el textil del estilo colonial, adquieran mayor importancia las cortinas que tienen que evocar a la naturalidad y para ello se deberán utilizar materiales como el lino o el algodón.
En cuanto a las alfombras se suelen incorporar alfombras grandes, de pelo largo y gruesas o de bambú.
Accesorios o elementos decorativos
Para ultimar la decoración colonial se deben incorporar accesorios o elementos decorativos, ya que éstos adquieren más importancia que en el resto de estilos. Es recomendable incorporar elementos antiguos como pueden ser candelabros, maletas clásicas.
A su vez, hay elementos que cuadran perfectamente con este estilo, como puede ser una mecedora de mimbre, repisas con libros o incluso fotografías de color sepia.
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