Hoy os vamos hablar de uno de los elementos indispensables en la decoración de todo hogar, el aparador.
Los aparadores son muebles que normalmente se colocan en los salones o comedores, pero gracias a que en ellos se puede almacenar de formas sencilla y muy organizada multitud de elementos, no solo se utilizan para guardar la vajilla y los utensilios del comedor, sino que además se suelen colocar en los recibidores, en el dormitorio e incluso en los dormitorios infantiles.
Sin embargo, a la hora de escoger el aparador perfecto para nuestro hogar nos pueden entrar muchas dudas y no saber cuál es el ideal para nosotros. Pues bien, para poder decidirnos por un aparador y saber cuál es el que mejor nos va, deberemos primero saber qué tipos de aparadores podemos encontrar en el mercado.
Para ayudaros y que os resulte más fácil escoger este tipo de mueble os vamos a explicar qué tipos de aparadores podemos encontrar. Recuerda que, en Muebles Luis Miguel, tenemos todo tipo de aparadores, ¡consúltanos!
Tipos de aparadores, teniendo en cuenta su diseño
Hoy en día existen muchos tipos de aparadores según el diseño. Entre las diferencias que podemos encontrar en ellos podemos destacar los siguientes.
Aparador bajo
Tal y como su propio nombre indica este tipo de mueble es bajo y se caracteriza por tener una altura máxima de entre 70 y 75 centímetros.
Los aparadores bajos son muy apreciados por los compradores hoy en día ya que están muy de moda gracias a que son muy discretos y son muy útiles para almacenar elementos sin apenas ocupar sitio en la vivienda.
Además, no solo sirve para almacenar sino que también es un elemento decorativo, dado que la parte superior del mismo podemos colocar motivos decorativos que le den un aspecto más personalizado y con carácter a la estancia.
Aparador alto
Al contrario de los anteriores, estos aparadores no se suelen utilizar tanto ya que se asocian con un estilo más antiguo pero aún así aun tienen cavidad en nuestras decoraciones.
En concreto, este mueble se caracteriza por tener una altura de entre 120 y 160 centímetros y por ser, obviamente, un gran elemento de almacenaje, no solo de elementos pequeños sino también de grandes dimensiones.
No obstante, si no te convence la altura del bajo ni del alto, no te preocupes porque existen los aparadores medios, que tienen una altura intermedia de entre 90 a 100 centímetros.
Aparador abierto o cerrado
Otro elemento a tener presente a la hora de escoger un aparador es si queremos que sea abierto o cerrado. Ambas posibilidades son buenas, lo único que tenemos que observar cuál es la más indicada para nuestro caso.
En cuanto a los aparadores cerrados, éstos ofrecen más protección en cuanto a los elementos que tengamos almacenados en su interior, además de dar privacidad a los mismos. Asimismo, son muy prácticos en el caso de tener hijos o mascotas para que no puedan acceder con facilidad.
Por otro lado, los aparadores abiertos son más vistosos y dan sensación de un bloque menos homogéneo. Sin embargo, existen aparadores que son semiabiertos, ya que tienen parte del mueble cerrado para poder guardar alguna cosa y parte abierta para poner elementos decorativos y que tenga una apariencia más ligera.
Con o sin patas
¿Aparador con o sin patas? Qué gran pregunta, verdad. Decidir si queremos el aparador con patas o no va a depender de cuanto espacio necesitemos para almacenaje.
Ambas opciones son muy buenas. No obstante, si nos decidimos por un aparador con patas tenemos que tener claro que el espacio que dispondremos de almacenaje será inferior al resto. Es decir, cuanto más protagonismo le demos a las patas menos parte de almacenaje tendremos.
Aparadores con apoyo
Puede ser que no te convenza mucho ni los aparadores con patas ni los suspendidos. En ese caso, puedes optar por algo intermedio, colocar un aparador con apoyo.
Este tipo de aparadores se caracterizan por estar suspendidos en la pared y a la vez tener solo dos patas en la parte exterior.
Esta clase de mueble da un aspecto moderno y sofisticado al ambiente por lo que no está de más que sea valorado también.
Suspendidos
Si buscas un aparador novedoso, que se salga de lo común y que nos aporte ligereza y sensación de ingravidez, el aparador que debes escoger es uno que quede suspendido en el aire.
Si, como lo lees, este tipo de aparadores, que los podemos encontrar en diferentes estilos, se colocan suspendidos y fijados en la pared. Eso sí, siempre hay que prestar mucha atención a que lo coloquemos adecuadamente en la pared para que no se caiga y sobre todo leer las especificaciones de cada fabricante para poder saber cuánto peso puede soportar el mueble.
Tipos de aparadores teniendo en cuenta el estilo
Dependiendo del tamaño
Algo que no podemos pasar por alto ni olvidar es que siempre antes de decidirnos por un mueble debemos saber de cuánto espacio disponemos. En concreto, si no disponemos de mucho espacio no deberemos colocar un aparador grande que nos ocupe todo el espacio, siempre debemos colocarlo de forma que no cargue el ambiente.
Asimismo, para que existan todo tipo de posibilidades podemos encontrar aparadores rectangulares para espacios más amplios, como cuadrados para espacios más pequeños.
Según el estilo
Por último, una vez que ya tenemos decidido cómo debe ser nuestro aparador ideal debemos prestar atención al estilo.
En el mercado tenemos multitud de estilos, no solo en aparadores, sino en todo tipo de elementos, por lo que encontrar el que más vaya con nuestra decoración o gusto no va a ser muy complicado.
En cuanto a estilos, existen muchos hoy en día, pero los que están muy de moda son los aparadores de estilo minimalista o nórdico con líneas rectas o elegantes, pero sin duda si tú eres de los más clásicos también podrás encontrar aparadores más clásicos o vintage.
Comentarios recientes