En el post de hoy vamos a hablar sobre la decoración de una habitación para el bebé. Un dormitorio en el que el bebé se pueda sentir seguro y que ofrezca todo tipo de comodidad a sus padres para poder cuidarle.
En primer lugar, tenemos que pensar en cuál va a ser la habitación elegida para tu hijo, en caso de tener varias opciones. Para ello, hay que atender a tres cuestiones fundamentales:
– Iluminación: Procura que el cuarto tenga luz natural durante el día.
– Proximidad: Que se encuentre lo más cercano a la habitación de los padres.
– Seguridad: Cuidar que los muebles y otros elementos del dormitorio sean peligrosos para el bebé (por ejemplo, los enchufes).
Además de todo ello, os pasamos varios consejos de decoración que te pueden ayudar:
– Utiliza colores suaves para pintar la habitación. Con esto aportamos tranquilidad al bebé.
– Pocos muebles. No satures la habitación del bebé y ten únicamente lo necesario: la cuna, mesa, cajones y juguetera. Hay que dar sensación de amplitud para que el bebé tenga su espacio.
– La cuna debe de ser resistente y segura. Además, no debemos de poner nada pesado sobre la misma.
De esta manera, el último consejo es que los padres utilicéis el sentido común. Se busca que el bebé se desarrolle en un ambiente tranquilo y seguro.
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